Por Redacción Central
La frase está trillada: «Es necesario volver al mundo». Sin embargo, los datos del comercio exterior publicados hace pocos días por el Indec no hacen más que confirmar la tendencia registrada desde hace dos años: las ventas argentinas al exterior siguen cuesta abajo.
En los primeros nueve meses del 2015, las exportaciones argentinas alcanzaron los 47.263 millones de dólares, un 16% menos que en igual período del 2014 y un 25% menos que en el 2013.
Al explorar los motivos de semejante caída, es imposible soslayar el tema cambiario. Es evidente que la decisión de sostener un dólar barato, al tiempo que los principales socios comerciales devaluaron fuertemente su moneda, no hace más que encarecer los productos argentinos en el exterior. El resultado natural es la baja de las ventas.
Lo saben bien los productores frutícolas de la región, que debieron enfrentar una cruda temporada el verano pasado y avizoran un panorama similar para el inicio del 2016.
Pero si la intención es verdaderamente volver a colocar los productos argentinos en la canasta de consumo del resto del mundo, cabe preguntarse si la mala performance de los últimos años es sólo a causa del tipo de cambio y de la caída de los precios internacionales.
Una respuesta integral para el impulso de la fuerza exportadora debiera también contemplar los incentivos para la producción de bienes transables, a fin de incrementar los volúmenes exportables.
En este sentido, el costo interno de logística y mano de obra y la carga impositiva interna son factores determinantes. Según un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), la carga tributaria promedio efectiva llegó al 35% del PBI en el 2014.
Recomponer el dinamismo del Mercosur, y especialmente la relación estratégica con Brasil, es la otra materia pendiente. Uno de cada cuatro dólares por exportación ingresado en los primeros nueve meses del 2015 proviene de Brasil. Ello pese a que en el mismo período las ventas al vecino país cayeron un 24% en términos interanuales.
Un desafío más para la nueva etapa de política económica que se inicia en diciembre.
Fuente: Río Negro.com.ar