por MARIANO GORODISCH
Luego del bajón de octubre y primera semana de noviembre, el volumen del contado con liqui se duplicó, al pasar de u$s 20 a u$s 40 millones diarios. Se debe, principalmente, al cepo que le puso el Banco Central a los importadores, al autorizarle a girar apenas u$s 50.000 diarios. «El importador está muy activo desde hace mucho tiempo, y por suerte, tiene al dólar liqui para seguir operando y liberando crédito, porque sin el CCL ya hoy tendríamos un cierre importador externo y una crisis por escasez de bienes productivos», revelan en las mesas.
De todos modos, no es que los importadores estén pagando íntegramente importaciones con liqui porque es ilegal. Lo que hacen, entonces, es pagar un 10% o hasta un 20% de la deuda importadora que tienen cuando el BCRA les patea los pagos por más de un mes. Así, mantienen la cuenta corriente con el proveedor abierta y siguen comprando a crédito. Pero en algún momento deberán saldar el total, y eso debe hacerse por el MULC, salvo que cuando asuma Macri liberalice la forma de pagarlo, permitiendo usar el CCL.
En las últimas ocho ruedas, el volumen negociado en dólar liqui pasó de $ 150 millones a $ 300 millones sólo en Bonar, y la mitad de ese volumen lo demanda la importación. En el Bonar 24 el volumen de CCL suele ser mayor que en Bonar X, ya que concentra el 65% del total.
«No se está pagando íntegramente importaciones con liqui, sino que se paga una parte pequeña, que es considerada más deuda comercial que otra cosa. Ahora cambió la ponderación: se pagan menos utilidades y más deuda comercial», aclaran las fuentes de la City.
Se derrumbó dólar Bolsa
El dólar Bolsa cayó con fuerza 47 centavos a $ 14,05, mientras la baja del liqui tuvo una gran disparidad: $ 14,35 en Bonares y $ 14,75 con acciones. Influyó en gran medida que los bancos desarmaron posiciones en títulos públicos, al cumplir con parte de la nueva normativa del BCRA vinculada a posiciones en dólares de terceros. Estiman ventas de $ 140 millones en Bonar X para cumplir con la reglamentación, lo que hundió el precio y generó tanta disparidad. «Parece que no van a judicializar lo que corresponde a las posiciones en dólares sobre activos locales y la plata de terceros. Pero puede que judicialicen el tema patrimonial de ellos», especulan las fuentes del sector.
Con esta norma, la intención del Central sería que los bancos desarmen su posición de futuros, para evitar tener que vender de a $ 400 millones por día, en caso de que el juez Bonadío no paralice la operación. «Anses tiene 20% promedio de los bancos y esto es un duro golpe patrimonial, porque quedan sin cobertura alguna a la devaluación», advierten los mesadineristas, mientras especulan si Macri no le pedirá a Cristina Kirchner que solicite la renuncia a Vanoli para comenzar la transición en el Central.
El blue, en tanto, abrió en baja a $ 14,85, para cerrar finalmente en alza a $ 15,19, en un mercado con un volumen reducido, de apenas u$s 10 millones, un tercio de lo habitual.
Fuente: Cronista.com