El tema del ingreso ilegal de municiones por la frontera, en Salta-Bolivia, no es nuevo. Viene de hace varios años, al igual que el narcotráfico y el contrabando de mercadería, a raíz de la fragilidad en los controles. Este año se constató que en la capital de la ciudad norteña había una fábrica que traficaba armamento para el país andino. “Sabemos de dónde han salido, son mercaderías que salen y vuelven a entrar”, contó entonces el fiscal federal José Luis Bruno.
Este funcionario judicial quedó en el centro de la escena en octubre pasado, cuando propuso construir una muralla en el límite entre ambos países, como medida contra el narcotráfico. “No sería un muro como el de EE.UU. con México, pero a Bolivia no le interesan soluciones porque Bermejo creció y ahora es más grande que Orán. Por algo los narcos eligen esta frontera, porque está desprotegida”, dijo Bruno.
Ante la polémica que se desató, el fiscal tuvo que retractarse, luego de que ser tildado de “xenófobo”. “No propuse levantar un muro, es una confusión que me gustaría aclarar. Pido que el tránsito hacia Bolivia sea únicamente por el puente internacional, en ese sentido necesitamos que se haga un murallón de contención para encauzar el río Bermejo”, dijo al diario El Tribuno.
Fuente: Clarín.com